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“Gardel, Perón, Icardi y Luca Prodan son las cosas que nunca mueren en este país”

Con su habitual ironía para contestar preguntas que muchas veces son reiterativas sobre el mito que encierra Luca Prodán, para Roberto Pettinato, la obra de su amigo y Sumo está siempre vigente, y resurgiendo hasta en modo polémico, en forma de música y anécdotas.

No es nada nuevo decir que Sumo ha tenido un lugar privilegiado en el panteón del rock argentino, y claramente lo fue por su arrolladora identidad musical, marcando un punto de convergencia de géneros como el post punk, la new wave, el reggae y el punk, amalgamándolos en un sonido único.

Ya son 38 años sin la presencia física de Luca Prodan y, aun así, sigue siendo un mito que no para de crecer. Su nombre y su legado aparece cada tanto inscripto en alguna bandera, en remeras, en grafitis de las paredes de la ciudad o en historias de anécdotas que la gente propaga y muchas de ellas a veces no son ciertas.

Se podría decir que Roberto Pettinato fue uno de esos pocos amigos de ruta que tuvo Luca con la música, las letras, los delirios y tantas experiencias compartidas que encierra una amistad y que florecen con los recuerdos. También desde su lugar como comunicador, mucho viene haciendo para mantener encendida la llama de Sumo, tocando su música, contando algunas de esas anécdotas imposibles de guardárselas, y que además sirven para desmitificar algunas historias que a veces dañan la imagen de algunos artistas.

Sumo x Pettinato es la propuesta que el saxofonista, conductor y escritor lleva a lo largo y ancho del país, y anoche le tocó el turno a Santiago del Estero, donde un desaforado público cantó y bailó los grandes éxitos de la mítica banda en el marco del “Santiago Rock Festival Vol.1”, que además contó con la participación de grupos locales como Condenados del Rock, Aplanadores, Los Polarizados y La Ribera, como grupo invitado de Tucumán.

“Soy el único Sumo vivo que toca solo temas de Sumo. Eso es mucho. Gracias a Dios, la gente en el interior sabe los temas, los canta y los espera”, reconoce el artista, en una entrevista con El Librepensador, luego de hacer vibrar al público que se llegó para experimentar la experiencia Sumo en el Tinkuy Patio Cultural del Parque Aguirre.

Formación de Sumo en 1983: Luca Prodan, Alejandro Sokol, Roberto Pettinato, Germán Daffunchio y Diego Arnedo. Foto: Claudina Pugliese.

No importa el lugar, si es Santiago o Buenos Aires, el frenesí del público que ha seguido la obra de una de las bandas más populares del país explota extasiada de escuchar sus canciones, y sobre eso Roberto explica su punto de vista:

“Los lugares son todos iguales para todos. Los Stones siempre piensan la nueva gira en un lugar para 300 personas o para más, y por algo lo harán. Santiago el Estero es genial porque al no haber venido con la banda nunca antes, entonces podés mirarlo desde otra perspectiva. Es como empezar todo de vuelta por vez primera”.

 

¿Crees que Sumo es una banda que nació para ser eterna?

-Es evidente que sí. Sumo es una banda de rock y no una cualquiera de los años 80, entonces nunca morirá. Por siempre está aquí y la gente lo sigue escuchado como si nada. Son temas que los bailas y los cantas y esto es algo que no pasaba antes, porque Sumo no era tan popular como Soda, por ejemplo.

 

Luca es claramente un referente musical que siempre está siendo evocado ¿Qué banda o solista actual en nuestro país te recuerda más a la impronta artística de Prodan?

-Elegante (risas) o Wanda (Nara) con el escándalo que durará para siempre en la memoria del pueblo argentino. Esas son las cosas que nunca mueren en este país: Gardel, Perón, Icardi y Luca Prodan.

 

Ya dijiste en muchas ocasiones que Sumo x Pettinato no es un tributo. ¿En cada gira hay sorpresa de temas que nunca tocaste o más bien haces reversiones de los éxitos que ya conocemos?

-Justamente son las versiones de Sumo para fans del grupo y para todos los que nos aman y amamos. Nada más. Sonamos mucho mejor que una banda tributo, porque sencillamente no somos una banda homenaje, porque yo estoy vivo. Soy el único Sumo vivo que toca únicamente temas de Sumo y no propios, y lo hago para mantener la llama encendida siempre.

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