Toviggino vs. Bullrich: “Habla de violencia usted que fue terrorista y puso bombas en jardines de infantes”
El dirigente esgrimió su derecho a la libre expresión y rechazó los cuestionamientos de la funcionaria, que lo había intimado a retractarse en su cruce con el jefe de Gabinete, Guillermo Francos.

El dirigente de AFA, Pablo Toviggino, respondió con dureza a la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, al cuestionar su autoridad por recordarle su pasado violento en los años ’70.
La ministra intimó al dirigente de Santiago del Estero a “retractarse o asumir las consecuencias” por haber expresado “Te deseo un MUY FELIZ Y TRISTE FINAL… PRONTO” en su anterior cruce en X con el jefe de Gabinete, Guillermo Francos. Ese intercambio se produjo en medio de la discusión por la vuelta de público visitante a las canchas.
El tesorero contestó a la ministra: “He recibido su carta documento, en la cual pretende usted señalarme los límites de la expresión y más insólito aún, darme lecciones sobre lo que constituye o no constituye violencia. Me permito entonces rechazar en todos sus términos la totalidad de su comunicación, por improcedente, absurda y por momentos, tragicómicamente autoritaria”.
“Por empezar, le informo — aunque estimo que lo sabe, pero ha decidido ignorarlo — que la Constitución Nacional me garantiza el derecho a expresarme libremente. Eso incluye, por cierto, el derecho a desear, pensar y opinar como me plazca, incluso cuando a usted no le guste. Desear un país libre de políticos como Ud. y Dientes Amarillos (Guillermo Francos), en mi opinión es de persona de bien, que quiere a su patria y pretende lo mejor para sus conciudadanos”, fustigó.
“Respecto al contenido de su misiva –reflexionó Toviggino-, debo decir que resulta una ironía que usted, de todos los funcionarios disponibles, se arrogue la potestad de definir lo que es violencia. Y más aún, que lo haga sin sonrojarse, siendo parte de un gobierno cuyo Presidente, Javier Milei, afirmó públicamente — y sin desmentida suya, por cierto — que Usted fue terrorista y puso bombas en jardines de infantes. Si eso no constituye violencia, quizás deba actualizar sus definiciones o bien conversar seriamente con su Jefe”.
Por otro lado, dijo celebrar “que la preocupación del Ministerio de Seguridad se oriente a controlar opiniones en lugar de, por ejemplo, el crecimiento de la violencia real que se vive en el país. A este ritmo, pronto vamos a necesitar protección, no de los delincuentes, sino de la censura disfrazada de institucionalidad”.
Por último, señaló: “Me reservo todos los derechos constitucionales y legales que me amparan para continuar diciendo lo que pienso, cuando quiera, como quiera y donde quiera. Le guste o no, Sra. Ministra, eso es la libertad. Esa misma que ustedes invocan para privatizar todo, menos el pensamiento. Sin otro particular, la saludo con la distancia ideológica y moral que usted misma ha sabido ganarse”.