Miguel: “Es histórico el grado de participación de los matriculados del Colegio de Abogados”

El presidente del Colegio de Abogados, Luis Alberto Miguel, se refirió a las actividades organizadas por el día de esa profesión, este 29 de agosto, y también a importantes avances obtenidos y desafíos, en el comienzo de su segundo mandato. Por ejemplo, el proyecto de creación de bono como aporte para sustentar la institución, la ley de Honorarios Profesionales, la absorción de la Caja Forense, la integración del club de Abogados y también la prédica por la carrera de los letrados que se desempeñan en el Poder Judicial, entre otros tópicos.

“Es una semana muy especial. Estoy muy contento porque logramos una cohesión de valores y sentimientos con los y las colegas, que en mi ejercicio profesional -en el que humildemente llevo 35 años- pocas veces he podido notar. Los colegas nos animan a dar algunos pasos importantes”, evaluó Miguel.

En la semana del Abogado, el colegio lleva a cabo una serie de actividades como parte de los festejos. Comenzaron el domingo con una maratón de 5 kilómetros y un torneo de padle, fútbol mixto y de vóley, en el predio denominado Club de Abogados.

“Mientras en el contexto nacional se discute la Ley Bases y la flexibilización, nosotros analizamos cómo vamos a llegar a que el trabajador y el empleador tengan un cauce para discutir la accesibilidad a la Justicia, a través de una instancia conciliatoria laboral, que viene a abreviar todos los plazos”.

El lunes se presentó en el colegio un proyecto de ley de mediación laboral, con la presencia de la ministra de Justicia y Derechos Humanos, Matilde O’mill y la secretaria de Trabajo, Julia Comán. “Mientras en el contexto nacional se discute la Ley Bases y la flexibilización, nosotros analizamos cómo vamos a llegar a que el trabajador y el empleador tengan un cauce para discutir la accesibilidad a la Justicia, a través de una instancia conciliatoria laboral, que viene a abreviar todos los plazos”, aseguró Miguel.

En ese sentido, dijo que los abogados laboralistas pidieron que se requiera al órgano de aplicación de la ley, el ministerio de Justicia o la Secretaría de Trabajo, pequeños instructivos o tutoriales de video.

Este miércoles se organizó una jornada del Instituto de Derecho de Familia y el jueves se realizará una misa por los abogados fallecidos y desaparecidos. Luego se hará en el salón del colegio un “cantobar”, en el que aquellos que tienen sus talentos animarán la reunión. Por la tarde, a las 19.00, se hará un homenaje en el Fórum a los abogados que cumplieron 25 y 50 años de profesión en 2023 y 2024 -ya que el año pasado no se pudo realizar- y también a algunas personalidades destacadas.

El viernes a las 12.00 se hará la tradicional “quinchada” de abogados en Abba Huasi, un local en Yanda. “Es una profesión muy compleja y es muy difícil estar juntos cuando representamos intereses, y es más difícil representar a los colegas que representan intereses (…). Y nosotros ahí vamos a estar bailando y conversando con nuestros colegas de la contraparte, nos olvidamos de todo para pasar un buen momento”, explicó.

“Simplemente, pedirles a los colegas que nos sigan acompañando porque seguiremos trabajando para el bien de la colegiatura y de cada uno de los que abracemos. Y pedirles a los distintos poderes del Estado e instituciones que nos apoyen: los abogados no somos malos ni mordemos, vamos siempre a acompañar y lo que necesitamos es empatía, ponernos en el lugar”, acotó.

Exigimos el cargo de relatores, existe la función, y los queremos para ellos. Queremos concursos para el proceso de selección de los abogados empleados del Poder Judicial y también se los pedimos al Consejo de la Magistratura.

Por otra parte, Miguel recordó que “la mayoría de los políticos son abogados y surgieron de este colegio y queremos tener un servicio de administración de Justicia mejor y nos ponemos a disposición. Vamos a abrazar en el homenaje y en la fiesta a los colegas que tienen la matrícula suspendida, pero forman parte del colegio y están trabajando en la Justicia. Exigimos el cargo de relatores, existe la función, y los queremos para ellos. Queremos concursos para el proceso de selección de los abogados empleados del Poder Judicial y también se los pedimos al Consejo de la Magistratura. Lo necesitamos, no se olviden que el Colegio de Abogados es una persona jurídica pública no estatal, por vía de delegación en la ley Orgánica de Tribunales nosotros participamos en él con tres representantes. Nosotros recibimos el mandato estatal de tener el consultorio gratuito y la mediación comunitaria. Queremos más”.

AVANCES Y PROYECTOS

El presidente del colegio también trazó un balance sobre temas cruciales para el foro, entre los cuales destacó la obtención de ley de honorarios, que fue sancionada por la Cámara de Diputados: “fue un hito histórico, porque la última había sido de 1994, cuando (Juan) Schiaretti con su nefasta intervención en Santiago nos vino a aplicar una ley Ómnibus donde nos equiparaba una ley de honorarios con una ley nacional, hoy derogada, por suerte. Tenemos nuestra propia ley provincial que nuestros colegas todavía no la advierten porque es para las causas iniciadas a partir de abril, pero está muy bien hecha y proclama la unidad de medida arancelaria para fijar los honorarios, que se actualizará a medida que sigamos escuchando los anuncios de nuestro gobernador para los salarios vitales y móviles para los jueces, porque esa unidad es el 3% de esto”.

-Hace poco hubo una asamblea en la que se resolvieron cuestiones muy importantes para el colegio.

-El martes 20 de agosto tuvimos un hito histórico para nuestra gestión, una asamblea con más de 200 personas, colegas que desbordaron el salón, y se trató sobre el proceso liquidatorio de la Caja Forense y un mandato al consejo directivo que presido para solicitar al gobierno de la provincia y al Poder Legislativo un bono judicial razonable, aplicado a los colegas que litiguen, para que el importe de él pueda volver en beneficios, en el pago de matrículas, de su previsión, de un seguro. Necesitamos ese bono porque nuestra entidad está desfinanciada totalmente y, además, se trató sobre la posibilidad de un contrato de fideicomiso para que la Caja Forense, hoy en proceso de liquidación, le encomiende al colegio la administración del edificio en garantía a los trabajadores, que son parte de la familia y queremos absorberlos. Y por unanimidad de los presentes se aprobó el traspaso de los trabajadores, para lo cual necesitamos ese bono como una herramienta de financiamiento.  

Vamos solicitar al gobierno de la provincia y al Poder Legislativo un bono judicial razonable, aplicado a los colegas que litiguen, para que el importe de él pueda volver en beneficios”

-¿Ese bono sería un porcentaje de cada causa que ingrese?

-No, ahora sería un fijo razonable que deberíamos acordar y consensuar, que debería ser un porcentaje fijo de la Unidad de Medida Arancelaria (UMA) pero que debería ser un importe fijo, ya no más porcentajes, ya no más comerle al colega un porcentaje de sus honorarios. Eso tiene quedar bien sentado: esto tiene que ser un adelanto de aporte del colega a la matricula.

-¿Con cada causa?

-Sí, con cada intervención de cualquier abogado como actor o demandado y que le sea aplicado al pago de la matrícula y que abone a su jubilación y seguro de vida. Y si el colega supera su aporte, o ya es vitalicio o jubilado, que pueda cederle a otro colega de su estudio, un familiar o tercero, la posibilidad de que se le acredite. El colegio está convencido que de lo único que puede vivir es de su matrícula y a ella llegamos por dos caminos: el pago voluntario en ventanilla o el pago de la retención, a través de este bono, que tendría que ser un importe fijo. Puede haber dos estándares de importe fijo, según la naturaleza de los juicios, pero ya no un porcentaje de los juicios que sea gravoso en la actividad del abogado o hasta se puede considerar confiscatorio. No es un tributo, es simplemente un aporte del colega.

-¿Esto viene a reemplazar la tasa de Caja Forense, que fue derogada el año pasado?

-Sí, la Caja Forense tenía un ingreso obligatorio, pero del cual no recibía el beneficio el colega. Aportábamos todos y, en su momento, sacaban el 5% de honorarios a lo que percibíamos, pero no se veían beneficios. Ahora el colegio debe, por imperativo legal, estatal y de todos, administrar ese recurso. Eso es lo que se decidió en la asamblea, que fue un enlace de medios, no de resultados. Se me facultó a gestionar, lo que lleva un tiempo de negociaciones internas y externas. Este es un camino en el que necesitamos el aporte de todos porque créanme que es muy difícil tener en el colegio 3 empleados y pasar a abrazar a 9 más. Los necesitamos. El colegio también recibió en comodato del ministerio de Justicia, al que agradecemos, un nuevo edificio en Absalón Rojas 741, donde funciona la Comisión de Jóvenes Abogados, los institutos, Defensa del Consumidor y el consultorio jurídico gratuito. Necesitamos del aporte de todos.

-¿Con los beneficiarios de los servicios sociales de la Caja Forense qué sucederá?

-Lamentablemente hoy el colegio no puede dar respuestas a algunos servicios sociales. Sólo podría comprometerse a gestionar en el seguro colectivo, con el aporte de los colegas, porque no tenemos ingresos, porque con la matrícula que hoy irrisoriamente está en $4000 por mes, no podemos alcanzar a darle ningún beneficio. Apenas nos alcanza para el sustento de nuestros costos fijos, que ya son limitados y austeros, de modo tal que hoy no podemos dar respuesta. Pero me comprometo a que con este bono, de llegar a existir, pueda dar respuesta a todos esos seguros de nuestros colegas, que por su edad no van a ser recibidos en otro contrato.

-¿Con el Club de Abogados también hay novedades?

-Lo que antes se llamaba el Club de Abogados, que era una asociación civil y privada, manejada por algunos colegas, con no más de 100 afiliados, hoy su predio que pertenece a los abogados ha sido dado en comodato por la municipalidad solamente al colegio. Estamos buscando unificar las instituciones. Paradójicamente es muy difícil representar a los que representan. Los que representan intereses todos queremos tener una porción del manejo de algo y no podemos. Tenemos que hoy el contexto nacional nos amenaza a la colegiatura, que es la única institución que por derecho público provincial puede controlar matrícula tenemos que fortalecerla y no disgregarnos. De modo que lo que llamábamos Club de Abogados, con el predio de la Costanera, pertenece únicamente a todos los abogados, es decir, a través del colegio. También pedimos el aporte porque nosotros no tenemos asignado ningún fondo para mantenimiento. Lo vamos a hacer y vamos a trabajar: tenemos tres cortos y largos años para eso.