Los hogares no comen inflación, sí frutas y verduras, que suben más del doble que el índice general
Los precios del Mercado Central son más representativos de la mesa familiar que el IPC que publica el INDEC, y los aumentos los paga directamente la población.

La brecha entre los puestos del mercado concentrador con las góndolas de los supermercados se ubicó en un 159,1% a favor de estos últimos centros comerciales, registrando una suba de 36,3 p.p. en relación con el mes anterior, de acuerdo con un informe del Centro CEPA.
Mientras que la batata y la cebolla contrajeron sus brechas un 50,7% y un 3,8%, el zapallo, la papa, el tomate y la lechuga la incrementaron un 47,4%, un 47,3%, un 29,4% y un 28,1% respectivamente.
La tendencia evolutiva del índice provoca un incremento de 4,4% en el segmento verduras, tubérculos y legumbres del IPC respecto a julio 2025.
De esta manera, el ponderador de la división Alimentos y Bebidas no alcohólicas, que es de 2,2% en el IPC, mostró una tendencia alcista de 0,1% en el índice de agosto.
INCIDENCIA EN LA CANASTA
Las hortalizas y las frutas representan buena parte del consumo de la canasta de los argentinos.
La incidencia de las verduras en el Índice de Precios al Consumidor (IPC-INDEC) alcanza el 2,2% en la región Gran Buenos Aires y hasta 3,6% en las regiones noreste y noroeste del país.
Por su parte, la incidencia de las frutas es de 1,3% en la región Gran Buenos Aires y 1,5% en el noreste y noroeste del país.
La apertura de datos muestra que la cebolla fue la única especie que no varió su precio, pero en cambio, el tomate, la batata y el zapallo lo incrementaron 58,0%, 19,5% y 0,4% respectivamente.
En tanto, las demás los contrajeron: la lechuga -35,3% y la papa -19,2%.
La variación interanual del segmento mostró una contracción de 38,8%.
TOMATAZOS
El tomate exhibió la mayor variación acumulada 183,3% y la mayor variación interanual se vio en la batata: un 15,4%.
El sector papero enfrenta una crisis por sobreoferta, altos costos dolarizados, pérdida de exportaciones y competencia desleal frente a países subsidiados.
Desde la FENAPP advierten que los insumos importados resultan mucho más caros que en países vecinos, lo que vuelve inviable la actividad.
A ello se suman los impuestos internos, que encarecen toda la cadena productiva.
En el primer semestre, los productores perdieron hasta el 50% de la inversión y en algunos casos se proyectan pérdidas totales.
PASÓ NARANJA
En cuanto a las frutas, durante agosto, la única especie que contrajo sus precios fue la naranja, un 0,4%; todas las otras tuvieron un comportamiento alcista el limón 13,5%, la banana 7,4% y la manzana 13,5%.
La variación interanual del segmento fue 22,8%.
El limón encabezó la estadística, con un 61,0% y nuevamente acumuló una caída del 66,9%.
Es que la industria limonera atraviesa serias dificultades, aunque se reactivaron exportaciones: el “limón del verano” hacia Chile y el “limón siciliano” al sur de Brasil.
Si bien estas ventas externas fortalecen a la economía regional, podrían reducir la oferta en el mercado interno y presionar al alza los precios en el MCBA.
En cuanto a la banana, mostró un fuerte aumento por el corte del paso Cristo Redentor y por ende una mayor demanda.