La velocidad de aterrizaje y el largo de la pista habrían determinado la tragedia en San Fernando
Los pilotos Martín Fernández Loza y Agustín Orforte habrían muerto por inhalación de monóxido de carbono tras haber quedado atrapados en la cabina del avión.
Este miércoles comenzaron los peritajes al avión que se estrelló en San Fernando y en el que murieron sus dos tripulantes: Martín Fernández Loza, de 44 años, y Agustín Oforte, de 35, piloto y el copiloto, respectivamente. Los investigadores ya tienen algunos datos preliminares sobre los motivos por el cual la aeronave se despistó y se incrustó en una casa.
Según trascendió, la velocidad en el aterrizaje tuvo incidencia en el accidente fatal. Además, los médicos de la Policía Federal Argentina (PFA) que hicieron la evaluación preliminar determinaron que los tripulantes murieron por asfixia, debido al monóxido de carbono acumulado en la cabina.
El presidente de la Sociedad Argentina de Aviación, José María Abaca, explicó que los Bombardier Challeger 300 no salen de fábrica con una caja negra, el dispositivo donde se recopilan los últimos datos de los vuelos: “Los aviones pesados, de transporte de pasajeros, tienen que tenerlas, pero este tipo de avión no”, aseguró.
No obstante, indicó que esta clase de aeronaves sí cuentan con un CVR (Copy Voice Record) que puede ser fundamental para entender qué pasó en San Fernando: “Es la charla entre los pilotos donde se toman los últimos 30 o 20 minutos de vuelo”.
LOS MOTIVOS DETRÁS DE LA TRAGEDIA
Sobre el motivo por el cual pudo haber ocurrido la tragedia, indicó que “se pueden hacer muchas hipótesis sobre lo que pudo haber pasado, aunque todavía no hay nada concreto”. “Tratamos de no dar las conjeturas hacia afuera”, señaló.
Sin embargo, Abarca elaboró un análisis potencial: “No tengo duda de que algo pasó, porque aterrizó bien y luego no frenó. El aterrizaje es el contacto con el suelo, o sea que algo tiene que ver con el freno”.
“Los aviones frenan de dos maneras. Al momento que uno hace el toque en la pista, lo primero que hace es aplicar frenos, frenos de pie, frenos de freno de auto. Y lo que sigue es aplicar reversores a una turbina. La reversa es un complemento, pero lo que se hace es toque y freno”, detalló.
QUIÉNES ERAN LAS VÍCTIMAS
Las autoridades confirmaron que el piloto y el copiloto que murieron en el Challenger 300 eran Martín Fernández Loza, de 44 años, y Agustín Orforte, de 35. El Challenger 300 (matrícula LV-GOK) pertenece a la familia Brito, dueña del Banco Macro. Sin embargo, había sido alquilado a un tercero como vuelo charter.
La primera información, confirmada por la municipalidad de San Fernando, indica que pasado el mediodía de este miércoles el avión se fue de la pista, se incrustó en una casa y allí se originó el incendio.
Los Bomberos de San Fernando desplegaron un operativo para evacuar a los vecinos que viven cerca de la zona y apagar el fuego que rápidamente cubrió la aeronave. La investigación quedó a cargo de la jueza federal de San Isidro, Sandra Arroyo Salgado. (TN).