Un grupo de científicos de la UNSE y el CONICET, desarrollan el proyecto denominado “Aplicaciones biotecnológicas del aceite esencial obtenido del aguaribay”, que tiene como objetivo investigar el uso del aceite esencial de aguaribay, árbol que crece en Santiago del Estero, como bactericida e insecticida, entre otros posibles usos, para conservar vainas de algarrobo almacenadas y evitar que sean atacadas por insectos y/o bacterias.
Ya se han realizado todas las pruebas a nivel de laboratorio para comprobar la actividad antibacteriana e insecticida y próximamente, se comenzarán a realizar pruebas a escala para evaluar el efecto del aceite en vainas de algarrobo almacenadas.
Axel Hollmann, director del proyecto, es Dr. en Biotecnología, Investigador independiente del CONICET y director del Laboratorio de compuestos Bioactivos del CIBAAL UNSE-Conicet. El investigador trabaja junto a un equipo conformado por Sergio Rodríguez, Dr. en Ciencias Químicas (Investigador y Docente UNSE CONICET); Andrea Cutro, Dra. en Ciencias Biológicas (Investigador y Docente UNSE CONICET); Anahí Bordón, Lic. en Biotecnología (Becaria doctoral CONICET) y Valeria Tapia Mattar, Lic. en Química (Becaria doctoral CONICET).
De acuerdo a lo especificado por el Dr. Axel Hollmann, las bacterias se van adaptando y se vuelven resistentes a los antibióticos existentes y esto marca la necesidad de encontrar compuestos nuevos que permitan controlar las bacterias.
Si bien se conoce que los aceites esenciales se utilizan generalmente en aromaterapias, en este proyecto se busca darle utilidad antibacterial e insecticida. A su vez, “este proyecto, pone en valor la flora de Santiago del Estero ya que busca encontrar las potenciales aplicaciones y pensar en una industrialización de estos hallazgos” así lo mencionó el Dr. Hollmann.