El gobierno blinda el Congreso por marcha de jubilados y amenaza con más represión
Movilizará a más de 2000 efectivos de la policía porteña y federal, más gendarmes y prefectos. Estará todo vallado en 100 metros a la redonda.

Más de 2.000 efectivos, entre policías de la Ciudad y fuerzas federales, se dispondrán este miércoles en el Congreso y sus alrededores, de cara al operativo de seguridad que se llevará a cabo durante la movilización de los jubilados.
En A24, el portavoz Manuel Adorni reafirmó la posición del gobierno nacional al advertir que quienes se movilicen “pacíficamente por lo que crean que es su su legítimo derecho y vean violencia, que se corran porque las fuerzas de seguridad van a actuar”.
Pese a los heridos que dejó el último operativo, entre ellos el fotógrafo Pablo Grillo, quien todavía permanece en grave estado, Adorni aseguró: “Si tienen que reprimir a los violentos lo van a hacer y es bueno que el que fue legítimamente a esa marcha a reclamar por algo que considera justo se corra y no pase un mal momento”.
En esa línea, se refirió al caso puntual del fotoperiodista y lo definió como un “hecho desgraciado que no debió haber ocurrido porque la violencia jamás debió haber existido”.
Fuentes oficiales revelaron a la Agencia Noticias Argentinas que a los 900 policías de la fuerza porteña que pondrá el Gobierno de la Ciudad se sumarán 720 policías federales y unos 400 entre miembros de Gendarmería Nacional y Prefectura Naval.
Por lo tanto, la cifra de uniformados superará los 2.000 efectivos, tras los incidentes que se produjeron el miércoles pasado entre los manifestantes y las fuerzas de seguridad.
En relación a la Policía Federal, para esta ocasión “prácticamente se duplicó” la cantidad de efectivos, algo que también copiarían Gendarmería Nacional y Prefectura Naval.
El Congreso y los alrededores estarán blindados, ya que permanecerán vallados a unos 100 metros a la redonda, por lo que no podrán circular los automóviles ni pasar las personas.
Por su parte, la Policía de la Ciudad desplegará unos 900 uniformados y 600 agentes de tránsito para llevar a cabo el control vehicular. a unas seis cuadras a la redonda.
De esta manera, predominó la idea que tenía la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, de evitar que los manifestantes pudieran llegar a las adyacencias de la Plaza del Congreso.