El detenido por el asesinato de Silvia Acevedo es adicto y ya había intentado matar a una persona

Brian González Cáceres posee un abultado prontuario delictivo, que incluye una tentativa de homicidio, pese a lo cual se encontraba excarcelado y, para peor, se habría quitado una tobillera electrónica impuesta por la Justicia. Está detenido por el brutal asesinato de Silvia Alicia Acevedo, una jubilada de 67 años del barrio Primera Junta.

Este viernes 6 de septiembre sería indagado por las fiscales Yésica Lucas y Vanina Aguilera, aunque es probable que se abstenga de declarar por consejo de sus abogados.

Los abogados Javier Leiva y Juan Saín asumieron la defensa del joven, que enfrenta la probable condena de prisión perpetua por el homicidio agravado por alevosía y ensañamiento, críminis causa (para ocultar el delito) y abuso sexual. Las fiscales trabajan sobre la hipótesis de que mediante engaños hizo que la mujer ingresara a la casa abandonada de Pedro León Gallo y una vez adentro la neutralizó golpeándola con un bloque de cemento y apuñalándola. Lo que procura establecer es si antes o después de eso la violó, ya que la víctima fue hallada semidesnuda.

Lo que se trata de determinar es cómo llegó a esa casa abandonada y en venta, que solía ser refugio de adictos y prostitutas, aunque se sospecha que vagó sin rumbo hasta recalar allí. “Tanto la madre como el padre desconocían su paradero, porque había salido temprano el día anterior. Y como había perdido el celular, tampoco pudieron tener contacto, así que desconocemos por qué estaba en esa casa Brian”, indicó Leiva.

Su defensor también consideró que no conocía previamente a la víctima, según le dijeron sus padres.

El abogado sostuvo que la familia del acusado se mudó del barrio Siglo XXI por temor a represalias, pese a que manifestaron sus condolencias a los familiares de la víctima.

El imputado de 25 años cuenta con numerosos antecedentes. El más grave es el intento de homicidio de Facundo Araujo, a quien apuñaló el 20 de octubre de 2020, en plena pandemia, mientras ambos bebían en el barrio siglo XXI. La madre de la víctima se tuvo que interponer para que lo rematara y fue golpeada por el violento sujeto. Luego estuvo prófugo 45 días, hasta que fue capturado.

Pero también posee varias denuncias por violencia de género contra su expareja, con la que tiene un hijo, lo que se agrava por haber desobedecido prohibiciones de acercamiento.

“Es una persona que tiene adicción a las drogas y se les había ido de la manos a sus padres (…). También vamos a pedir una pericia psicológica”, reconoció Leiva.

González Cáceres estuvo detenido varios meses hasta que fue excarcelado en febrero de este año, pese a la oposición del Ministerio Público Fiscal, que advirtió los riesgos de liberar a un sujeto de gran peligrosidad y que enfrentaba la posibilidad de una condena de prisión y que ya había eludido a la Justicia. Se le impusieron estrictas condiciones, que, no obstante, violó una vez más. Sin ir más lejos, al momento de ser detenido no tenía la tobillera electrónica que debía portar obligatoriamente.