Comienza en Uruguay reunión del Mercosur clave para definir acuerdo con la Unión Europea
Es el primer encuentro al que asiste Milei, a quien interesa más un acuerdo con EE.UU., pero que, según Adorni, no está cerrado a tratados comerciales.
El Mercosur y la Comisión Europea esperan anunciar este viernes en Montevideo la finalización de las negociaciones para un acuerdo de libre comercio después de 25 años de tratativas, pero el rechazo crece entre algunos gobiernos europeos. Con la ilusión de que se firme, el presidente Javier Milei participará por primera vez en una reunión del pacto sudamericano y tendrá su primer encuentro formal con el presidente brasileño, Luiz Lula da Silva.
El complejo tratado con la UE está a un paso de cerrarse, al menos en su parte técnica y pese al enfático rechazo de Francia. El paso final sería dado este mismo viernes por los presidentes del grupo, según anunció el canciller uruguayo, Omar Paganini, que dijo que solo faltan “detalles mínimos”.
En Montevideo se encuentra la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, en una clara señal de que el proceso de negociaciones llegaría a su fin. “Tocamos tierra en Latinoamérica. La línea de meta del acuerdo UE-Mercosur está a la vista. Trabajemos, vamos a cruzarla. Tenemos la oportunidad de crear un mercado de 700 millones de personas, la asociación de comercio e inversiones más grande que el mundo haya visto. Ambas regiones se beneficiarán”, escribió la funcionaria europea en su cuenta de X.
LAS CINCO CLAVES DEL ACUERDO UE-MERCOSUR
Las negociaciones empezaron en 1999 y el tratado busca eliminar la mayoría de los aranceles entre ambas zonas, creando un espacio de más de 700 millones de consumidores.
Si se adoptara, permitiría que Brasil, Argentina, Uruguay y Paraguay exportaran a Europa carne, azúcar, arroz o miel. La UE exportaría por su parte vehículos, maquinaria o productos farmacéuticos. El acuerdo prevé cuotas de exportación de 99.000 toneladas de carne vacuna y la supresión de todos los derechos de aduana sobre 60.000 toneladas de carne importada del Mercosur.
Tras un acuerdo “político” alcanzado en 2019, la oposición de varios países bloqueó su adopción definitiva. La expectativa es que este viernes se cierre el acuerdo técnico.
Francia se opone al acuerdo para proteger su agricultura y presiona para que el tratado incluya las disposiciones del Acuerdo de París sobre el clima y que los compromisos adquiridos en materia climática sean vinculantes. Intenta además alinear desde hace semanas a varios países europeos para constituir una “minoría de bloqueo”.
Si se firma un acuerdo, la Comisión Europea deberá obtener su ratificación con la aprobación de al menos 15 Estados miembros que representen un 65% de la población del bloque y una mayoría en el Parlamento Europeo.
La expectativa es que este viernes se cierre el acuerdo técnico entre la UE-Mercosur: la Comisión Europea, y no los gobiernos, es la encargada de negociar acuerdos comerciales. Pero Francia e Italia se encargaron el mismo jueves de dejar claro que, aunque se acuerde un texto entre las partes, el proceso de ratificación de un TLC, que sí supone la aprobación de los países, se enfrentará con un muro de resistencia.
La cuestión central es la protección del sector agropecuario, que considera que deberá competir en inferioridad de condiciones con la poderosa agroganadería del Cono Sur.
Si se cierra el acuerdo, la UE necesitará ratificarlo a través de al menos 15 países del bloque, que representan el 65% de la población europea. Además, deberá pasar por el examen del Parlamento Europeo.
En el caso del Mercosur, cada país lo aprueba y entra en vigencia por separado.
El tratado, de concretarse, crearía la mayor zona de libre comercio del mundo con 700 millones de consumidores y un PBI combinado de 21,3 billones de dólares.
CUÁL ES LA POSTURA DE JAVIER MILEI
Esta será la primera cumbre del Mercosur de Milei. En la reunión celebrada a mediados de año en Asunción decidió ausentarse para no encontrarse con Lula. Sin embargo, ambos mandatarios se vieron y saludaron en un frío encuentro informal antes del inicio del G20 celebrado a mediados de noviembre en Río.
Ahora Milei tomará la presidencia pro-témpore del bloque por los próximos seis meses.
El mandatario argentino viajó a la capital uruguaya con su nueva estrategia que prioriza el pragmatismo en ciertos puntos de su política exterior. Al contrario de lo que se barajó en un principio, no irá a romper el pacto sudamericano, sino a intentar abrirlo y flexibilizarlo.
El plan, similar al impulsado por el presidente uruguayo saliente Luis Lacalle Pou, prevé que cada país pueda negociar sus propios acuerdos comerciales en forma individual, algo que prohíben los estatutos del mercado regional.
En ese marco, Milei planea avanzar con un acuerdo de libre comercio con Estados Unidos, tras la asunción de Donald Trump, tal como lo hace Uruguay con China, a pesar de las fuertes reticencias de Brasil.
El vocero presidencial Manuel Adorni subrayó que Argentina “siempre” permanecerá a favor de acuerdos comerciales dentro y fuera del bloque económico suramericano. “Todo lo que sean acuerdos comerciales vamos a estar de acuerdo, siempre, sean UE-Mercosur o un tratado de libre comercio con Estados Unidos”. (TN).