Así lucía la plaza Libertad en un domingo de fines del siglo XIX
Unas fotografías de 1874-1875 permiten un viaje en el tiempo para conocer cómo era la plaza principal del Santiago del Estero. Fueron tomadas por un pionero de la fotografía inglés, que se radicó en Córdoba y produjo 19 tomas históricas de la ciudad.
La plaza central de Santiago del Estero lucía muy diferente a la actualidad a fines del Siglo XIX, con una empalizada que la delimitaba, algunas pocas calles estaban empedradas y por allí circulaban carros y jinetes, con enormes casonas y establecimientos comerciales la rodeaban.
Una fotografía de 1875, tomada desde las actuales calles 24 de Septiembre y Avellaneda permite un vistazo a ese pasado, cuando la capital aún se mostraba como una tranquila aldea. En la imagen se aprecia a la izquierda la plaza principal (hoy Libertad), con un empalizado a lo largo. Al fondo el templo de San Francisco.
Sobre Avellaneda, la tercera casa de la derecha era la vivienda del farmacéutico alemán Augusto Bruchman, propietario de la Botica El Indio. La puerta del medio era el ingreso a la vivienda, mientras que las dos puertas de la izquierda correspondían a la botica, donde se preparaban las recetas magistrales.
La fotografía fue tomada entonces por Jorge Pilcher, según se desprende del libro “Historia de la Medicina en Santiago del Estero”, de Antonio Virgilio Castiglione. En ese momento la actual calle Avellaneda era llamada Independencia y la Libertad se denominaba Constitución.
Pilcher fue un fotógrafo inglés que llegó a Sudamérica como gerente del Banco Maua y se radicó en Mercedes de Uruguay, pero las pestes, las guerras civiles y la quiebra de la entidad lo llevaron a radicarse en Córdoba, donde abrió una casa de fotografía junto su compañero bancario, Alejandro Witcomb. Luego contrataría a varios fotógrafos profesionales para cubrir la demanda, por ejemplo, la comisión de retratar al Ferrocarril del Norte, concesionado a José Telfener, para enviar a la Exposición de Filadelfia de 1876, en EE.UU.
Con Clemente Artigue viaja a la ciudad de Santiago del Estero en 1874 y realiza tomas cuyas copias se encuentran en el Museo Histórico Nacional y en el Álbum «Vistas.Fotografía Inglesa.Córdoba». En total son 19 y podrían considerarse las primeras vistas de esta ciudad, ya que sólo se conoce una anterior de la Plaza Libertad, datada en 1865. En alguna se aprecia la calle Libertad, una vista aérea tomada desde el hotel de La Paz (en 24 de Septiembre y Libertad), que muestra la antigua casa de gobierno (hoy CCB) y los tribunales (hoy edificio comunal).
En una carta enviada por Absalón Ibarra a Domingo Sarmiento, que fue publicada el 26 de setiembre de 1874 en el diario El Progreso, explicita la razón del viaje de ambos a esta ciudad, para retratar y hacer conocer la ciudad, pero también con el propósito de establecer una sucursal de la ya denominada casa de “Fotografía Inglesa de Pedro Pilcher”:
“Vistas fotográficas. Santiago del Estero, 2 de septiembre de 1874. Excelentísimo Señor Presidente de la República D. Domingo F. Sarmiento: Distinguido compatriota y amigo: La idea que contiene la honrosa de V. E. del 19 del pasado es a mi juicio de gran importancia para la nación.
En efecto, nada más a propósito para hacer conocer nuestro país en el extranjero física y moralmente, que colecciones de vistas, tanto de los monumentos públicos ya nacionales o provinciales y aún de los edificios particulares, cuanto de los bellos cuadros que la naturaleza presenta por doquier.
Convencido pues de la importancia de esta obra y deseoso de satisfacer los deseos de V. E. me apresuraré a mandarle las vistas de la ciudad, villas, monumentos y paisajes de esta provincia, tan luego llegue un fotógrafo que tengo noticias debe establecerse en esta, pues actualmente no hay ninguno.
Felicito a V.E por este pensamiento de tanta trascendencia para el país y me honro en ofrecerme una vez más.
De V.E atento S.S. y compatriota”.
HISTORIA DE LA PLAZA LIBERTAD
Turismo de la provincia indica que “la Plaza Libertad tiene su origen en la Plaza Mayor, denominada originalmente Plaza de Armas, y que constituía tanto el centro de cada ciudad como la estructura clave para la red de calles urbanas trazadas a su alrededor. Además, actuaba como el núcleo de la vida social y la distancia de su casa respecto de la plaza determinaba la posición social de los habitantes de la ciudad”.
Es decir, que el lugar central en la ciudad fue la plaza pública, que cumplía una doble función: servir de punto generador del esquema vial y actuar como sede de las instituciones civiles (Cabildo) y eclesiásticas (Catedral). Al fundarse una ciudad, se determinaba en primer término el sitio donde se levantaría la plaza que debía ser lo más amplio posible y de fácil acceso. Se estima que su primer asentamiento fue en las actuales calles Alsina e Independencia. Hacia 1628, en su penúltimo traslado, habría estado ubicada en los terrenos que hoy ocupa el Teatro 25 de Mayo hasta que en 1670 quedó asentada en el sitio que ocupa actualmente.
Cerca de la plaza estaba instalada la aristocracia, formada por las familias de los conquistadores, los funcionarios de la corona y los encomenderos o grandes hacendados. El círculo siguiente era ocupado por la clase media, formada por comerciantes y artesanos. En este barrio se ubicaba por lo general el mercado municipal. En el último círculo, el más periférico, vivían los “blancos pobres”, los indios y mestizos.
Hacia 1860 le construyeron caminos de material y embaldosaron las veredas para que las damas pudieran pasear con la tranquilidad de saber que no ensuciarían sus vistosos ropajes. Gruesas cadenas marcaban el perímetro exterior procurando evitar que los animales ingresaran, la novedad de los bancos permitía un alto en los paseos, plantaron paraísos para obtener la tan preciada sombra.
En julio de 1865, durante el gobierno de Absalón Ibarra, fue inaugurada la estatua o monumento de la Libertad. Era una obra escultórica de origen europeo que tuvo desde su llegada una historia propia, ya que fue encargada para colocarla de remate de una pirámide que se levantó en el centro de la plaza a modo de homenaje del pueblo santiagueño al general Manuel Belgrano. Completaba el conjunto escultórico cuatro estatuas con la figuración simbólica de las estaciones del año, ubicadas en el basamento en forma equidistante a la columna central. Vale aclarar que estas estatuas se encuentran actualmente emplazadas en el Parque Aguirre de la ciudad Capital.
La Pirámide permaneció por casi 45 años hasta que fue reemplazada por un nuevo monumento en homenaje al general Belgrano: una estatua ecuestre montada sobre otro pedestal. Se sostiene que los vecinos llamaban a la estatua la “la Libertad avergonzada” por la inclinación de su cabeza, sin advertir que por razones técnicas y artísticas la obra debía ser así, dada la altura en la que había que colocarla y su actitud de contemplación de un pueblo reverente a sus pies. Luego de ser retirada de la plaza, la escultura fue depositada, en el Cementerio La Piedad, hasta que fue solicitada por un funcionario friense para ser traslada a la ciudad de Frías.
La plaza será bautizada con el nombre de Libertad en 1887 durante el gobierno de Absalón Rojas. En el centro fue colocada la estatua ecuestre del General Belgrano instalada en 1912, que fuera fundida en los talleres porteños de Julio Garzía y el quiosco de la retreta, obra de don Pedro Vozza, para las actividades culturales.
Ya entrado el siglo XX, continuaron las remodelaciones. Así, en 1920, se inauguró la fuente de hierro fundido que contaba con cuatro angelitos o querubines. Estuvo allí hasta 1974 cuando fue trasladada a la rotonda del puente Hipólito Yrigoyen (Carretero). Actualmente esta fuente se encuentra en el CCB.
Hacia 1960 fue construida una nueva fuente para cubrir una estación eléctrica transformadora que funcionó en su interior (subsuelo). Fue una obra del arquitecto Carlos David inspirada en motivos incaicos. Poseía un hermoso juego de luces combinadas con el ritmo de caída del agua.
Fuentes: Ámbito Santiagueño, Subsecretaría de Turismo de Santiago del Estero y Enfocados Córdoba.