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La madre del guardiacárcel asesinado para despojarlo de su moto pide “cadena perpetua para todos sus asesinos”

En un escrito advirtió que, por más que se afirme que que los acusados habían bebido y consumido drogas “estaban pensantes” y “planificaron” el asalto mortal a su hijo. También pidió que se castigue a quienes colaboraron con ellos.

Daniela Guerra, la madre del guardiacárcel asesinado David Gabriel Frontera Guerra, pidió la pena máxima para los acusados de tenderle una trampa mortal para arrebatarle su motocicleta.

 

“Dios me lo cuida, ojalá hubiera tenido más tiempo con mi hijo, Dios me lo regaló 23 años fueron tan poco pero muy vividos y tuve el regalo de traerlo a éste mundo, por eso quiero cadena perpetua para todos tus asesinos. Hijo querido, no descansaré hasta lograrlo, serás mí Ángel en éste camino siempre te amaré y llegará el momento en que te pueda abrazar y besar. Cuento los días para ése encuentro te amo fuiste un hijo ejemplar”, expresó la docente en sus redes sociales.

 

Por eso pidió al juez de Control con competencia juvenil, Gastón Merino, que “con todo lo que te hicieron haga justicia, pido por la justicia del hombre y sé que así será, confío en el juez”.

 

Frontera volvía la noche del 18 de noviembre a su casa para cambiarse y presentarse a trabajar, pero a la altura del Canal San Martín y Colectora lo esperaba una emboscada. Un grupo que bebía y se drogaba en esa zona ideó una trampa para asaltar y obtener más dinero: cuando frontera pasaba en su moto le trabaron la rueda con un palo y el joven cayó al canal, donde lo abandonaron agonizante. Lo despojaron de lo que pudieron y huyeron, para continuar la fiesta en el Bosco III, después de vender la moto por $150.000 en el barrio Ejército Argentino.

 

En un principio se creyó que se trataba de un accidente de tránsito. Pero un menor que formaba parte del grupo terminó confesando que lo habían asaltado y fueron detenidos Juan Gabriel Rodríguez (27), con residencia en el Bº El Vinalar; José Luis “Chavo” Orieta (41), de El Vinalar y Sebastián Alberto “Porteño” Gómez (38), del Bº 8 de Abril. Pero no serían los únicos involucrados: una mujer apodada “Negra” habría colaborado al pararse en medio de la calle buscando frenar la moto, para que sus cómplices atacaran al conductor.

 

“No descansaré hasta encerrar a los culpables y que paguen por quitarte la vida y a mí por arrancarme el corazón, te amo hijo”, escribió con mucho dolor su madre (…). Pido a mí Dios justicia por mí hijo estos asesinos y asesina, que tendrán su castigo”, señaló.

 

En ese sentido exhortó a que “éstos asesinos no salgan y no puedan seguir haciendo daño y quitar más vidas, hoy fue la de mi hijo mañana puede ser de cualquier habitante de mí amado Santiago, lamentablemente le tocó a mí hijo, un hijo ejemplar y buen ser humana éstos asesinos dejaron un vacío en mi familia. Y si mi hijo tiene que ser el principio para que éstos asesinos no vuelvan a matar a nadie más, lo acepto con un profundo dolor”.

 

“Espero su fallo de perpetua por quitar una vida, y como carroñeros fueron a su cuerpo sin importarles, ni un poco la vida de mi hijo”, subrayó. Pero también advirtió que por más que se indique que estaban drogados y alcoholizados, eso no sería un eximente porque tuvieron “tiempo de idear un plan (…), estaban pensantes y siempre viendo cómo delinquir. Y su plan de robar le tocó a mí hijo y no solamente le robaron lo mataron, no tienen perdón de Dios. El Señor da vida y éstos asesinos la quitan y tienen que tener un castigo castigo ejemplar”.

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