El Gobierno rechazó un informe de la ONU que advirtió por el hacinamiento de presos en comisaría
El Comité contra la Tortura de Naciones Unidas cuestionó las políticas oficiales sobre DDHH.

El Comité contra la Tortura de Naciones Unidas (ONU) publicó un duro informe con advertencias sobre la situación de presos en comisarías y cárceles de Argentina y sobre el rol de las fuerzas de seguridad durante manifestaciones.
Sin embargo, desde el Gobierno nacional expresaron en un comunicado su “enérgico rechazo” al texto porque “omite graves abusos ocurridos durante el gobierno de Alberto Fernández”.
“El documento exhibe un sesgo ideológico incompatible con la imparcialidad que exige el sistema internacional de derechos humanos”, remarcó el Ministerio de Seguridad en su repudio.
El documento apunta a irregularidades relacionadas al trato de personas privadas de su libertad, condenadas o con procesos abiertos. Especialmente a la situación de detención prolongada en comisarías, para la cual manifestó su “seria preocupación” por las condiciones en “dependencias policiales que son sumamente deficientes”.
El organismo describe esa situación con algunos ejemplos: “Celdas sin ventilación ni luz natural, falta de instalaciones sanitarias adecuadas, escaso acceso a agua potable y alimentación insuficiente y la falta de espacios al aire libre o zonas de recreo”. También remarcó que el Comité observó “demoras significativas” en la atención médica a las personas detenidas.
La ONU cuestionó el uso excesivo de la fuerza en el contexto de protestas. Reclamó al Estado que “debilitó” las disposiciones para que los agentes federales se identifiquen durante operativos y que con las resoluciones firmadas, el Ministerio de Seguridad “amplía su discreción para recurrir al uso de armas de fuego ante la mera sospecha”.



