Las causas del accidente del avión surcoreano: un pájaro, fallas en el tren de aterrizaje y el muro de cemento
El siniestro del aparato de Jeju Air causó 179 muertos. Solo dos personas sobrevivieron.

El aparente impacto con un pájaro y el fallo del tren de aterrizaje aparecen como las pistas más contundentes para entender el accidente sufrido este domingo por el vuelo 7C2216 de la aerolínea surcoreana Jeju Air, que causó 179 muertos y solo dos supervivientes.
Pero la opinión de un especialista encendió todas las alarmas. David Learmont, experto en aviación consultado por Sky News, dijo que sin el muro de hormigón contra el que se estrelló el aparato al final de la pista, “todos estarían vivos ahora”.
El Boeing 737-800 de la aerolínea Jeju Air se incendió tras impactar contra una enorme pared de cemento en el Aeropuerto Internacional de Muan, 290 kilómetros al sudoeste de Seúl, capital de Corea del Sur. El vuelo había partido en Bangkok, Tailandia.
Seis minutos antes de aterrizar, salirse de pista y estallar al chocar contra un muro, el vuelo 7C2216 recibió de la torre de control del aeropuerto de Muan una alerta de riesgo aviario. Esta alarma se emite cuando se detecta una gran bandada de pájaros o aves de gran tamaño en torno a la trayectoria del avión.
Dos minutos después, el capitán emitió un “mayday” o alerta de socorro antes de aterrizar sin desplegar el tren de aterrizaje ni aparentemente otros mecanismos de frenado, como los spoilers (las placas móviles situadas en la parte superior de las alas que aumentan la resistencia al aire) o el empuje inverso de los motores (que desvía la dirección del escape y reduce la aceleración).
Los expertos consideran que el fallo en un motor (imágenes captadas antes de aterrizar muestran llamas en el propulsor derecho, posiblemente por el impacto con un ave) no debería haber afectado a los otros sistemas y que será necesario dilucidar si además del supuesto choque, pudo haber también algún defecto en la aeronave o en el mantenimiento del aparato.
Se espera que la investigación se demore entre seis meses y varios años, sobre todo tras conocerse que una de las dos cajas negras, la grabadora de datos de vuelo (FDR), resultó parcialmente dañada y decodificarla llevará más tiempo.